Un certero disparo fugaz entre dos espiraciones

Un certero disparo fugaz entre dos espiraciones
Torció sus planetas para reunirse y poner su ombligo sobre la hierba
Apareció entre los arbustos
Consumiéndose del hielo otra vez como en la osadía
De querer aventarse en cada respiro,
En la inusual lluvia que da vueltas y regresa hacia atrás
Que no es sino la alegría que sigue cayendo y quema
Por ser un momento el abrazo pasajero,
La sonrisa agujereando la sombra,
De las batallas, del orgasmo de la guitarra
Las guirnaldas musarañas,
Las tonadas, y los sorbos de muerte y partida.

Un certero disparo fugaz entre dos espiraciones
Vino y atravesó las espadas con sus ojos descalzos
Y éstos hablaron a las otras canciones,
Soplaron como la seda a las matrices
De su mismo desengaño
Que no es sino la alegría
De seguir cayendo en el abrazo,
De reír por amor a reír
Y de amar por la risa del vértigo
Que entra y sale como serpentinas al aire
Que ya se acaba de ir en su carruaje.

Un certero disparo fugaz entre dos espiraciones
Torció sus planetas para reunirse y poner su ombligo sobre la hierba.