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sábado

Alquimia


Dice un texto de alquimia: "De una sustancia se hacen dos substancias y de las dos una que no se parece en nada a la primera".

lunes

Latido


Hasta en la acción aparentemente más sutil, en la más vana o la más infinitesimal de las decisiones, como el paso que debe tomar una hormiga del jardín, o en cualquier movimiento de una escondida célula de tu cuerpo, está presente el propósito; está atravesada por él de forma inexorable, cuando aparentemente sin causa alguna logras escuchar un lejano golpeteo de tambores que avanza y acerca lentamente a ti, un sonido profundo y continuo que toca tenue y sigilosamente, hasta que, casi sin darte cuenta notas que él ya ha convertido su naturaleza y su origen: se ha vuelto un latido del corazón.

martes

Las gracias


Gracias,
Sin tiempo después,
Después y antes del silencio,
Gracias.

viernes

La última pregunta


Creo que la última pregunta nos lleva inevitablemente al silencio, es por eso lo que sentimos, como lo que sentimos al contemplar una noche estrellada.

martes

Hojarasca


...Y sobretodo en las noches la hojarasca fue la que nos hizo callar;
Por el fuego envuelto en su piel de humedad subterránea,
Por el alba,
Por el barullo esparcido en el cuarzo,
En la misma entraña,
O simplemente porque quisimos dejar tendido nuestro antiguo cuerpo antes de ponernos a andar.

miércoles

Perfume


... Y el perfume de los sentidos abre sus alas y serpentea, sigue,
Destierra el presentimiento de lo perdido en el cuarzo,
Estira el anhelo,
Conserva el susurro en su boca un segundo,
Para luego destilar el alba
Y dejar que las líneas del mundo se unan al canto de la partida.

martes

Osadía


Y sin embargo...
Si la osadía traspasara lo cubierto, sin ahora la pared que quitaba las alas al caballo,
Tocase una campanada,
Si lo hiciese sólo para hacer vibrar ondas en el agua...
Sólo para que el olvido, un segundo después de partir, exude otra memoria sobre los ojos del cielo,
Para que el sol rasgue un silbido de piel en los hilos de una vasija y dibuje vuelos por todas las espirales...
Sólo para hacer espacio entre las ramas de un árbol,
Y dejar que otra realidad se cuele irremediablemente entre los dedos...

Y si sólo lo hiciese?

lunes

Nosotros


"Buda llegó a las puertas del cielo. Por supuesto, la gente estaba allí esperando. Abrieron la puerta, le dieron la bienvenida, pero él volvió su espalda a la puerta y miró al mundo millones de almas en el mismo sendero, luchando en la desgracia, en la angustia, esforzándose por llegar a estas puertas celestiales y a la felicidad suprema.

Un guardián de la puerta dijo: `Entra, por favor, hemos estado esperándote`.

Y Buda dijo: Cómo puedo entrar, cuando otros no han llegado? No me parece el momento adecuado. ¿Cómo puedo ingresar, cuando la totalidad aún no ha ingresado? Tendré que esperar. Es como si mi mano hubiese alcanzado la puerta y mis pies no hubiesen llegado aún. Tendré que esperar. Simplemente la mano no puede entrar sola."

No existe la iluminación individual. todos los individuos son parte de la totalidad.

jueves

Esferas


Las esferas transportan el brillo de tus ojos al beber del silencio.
Ellas saben lo que guardan en la noche,

Unas y otras juegan a desdoblarse sobre sus propios clamores,
Reposan suavemente en el ahora de su melodía,
Pálida, serena,
Tal como lo hacían antes, antes de nacer el sentido;
Ellas saben lo que guardan en la noche,
Lo saben desde el día en que el cielo quiso partir del mundo.

domingo

Darse


Creo que siempre es el espíritu quien nos señala, quien ofrece señales a nuestra atención para que podamos esparcirlas a través de nuestros sentidos; late con el corazón de nuestro camino y nos hace saber que todo es portador de él.
Cuando te das con corazón sucede lo que debe suceder y hallas lo que en el ahora debes hallar; abres los ojos y notas que todo ha estado dispuesto para encontrar y encontrarte, para ver y verte, sentir y sentirte, percibir y percibirte. Notas que dentro de cada paso hay una bolsita con burbujas dispuesta para la batalla que estés viviendo.

martes

Fulgor de los sentidos


Los sentidos son las cartas que denotan nuestra posición desde la nada hacia el lugar de nuestro propio encuentro,
Los sentidos son enigmas que en su cuerpo llevan escrita la poesía del secreto, la savia mágica que se esconde sigilosamente para que algún camino la hallemos,
Los sentidos son el corazón de la fábula y el misterio, son la sabiduría de nuestras caídas y nuestras tristezas,
Los sentidos son nuestra infinita soledad, son la nostalgia del respiro que no conocemos porque aún no ha sido aire que ha pasado por nuestros pulmones,
Los sentidos son también el arte de la contradicción, del caminar muchas veces a tientas y del temerse derrotado,
Del sentirse partido en dos y llevar las dos miradas hacia donde no hay referencia alguna,
Del tropezar en el punto de un círculo y sin embargo estar sonriente de las heridas que inevitablemente se transformarán en los versos que hablen de lo que no podemos hablar,
De aquello que hace brotar una vez más la sed incurable que cada noche une pasos errantes con el vacío,
Con esta locura de hojas de nadie, que sienten palpitar un destino tan sereno y tan silente como simplemente dejarse caer de una vez,
Y descubrir por fin todo aquello para lo que estaba abierto el misterio.

miércoles

Sueño de dos espejos


Algo alberga el destino que hacia la nada nos avienta,
Como si estuviéramos presentes desde antes,
Grabados en la memoria de los surcos,
Unos y otros sobre el balancín,
En los sentidos de la rueda, que de otra sintaxis se hacen de lo innombrable,
De lo que no se puede andar sino es sobre la nave de la desnudez,
Lejos de las antiguas pieles,
Cabalgando en cuatro corceles que anuncian en su paso el estallido que devora la contradicción,
La insondable locura que expande los hilos de un cuerpo nuevo tras dejar la crisálida,
Como fundir en el intento las páginas que queman el cielo con el sereno anhelo de este instante,
Donde sin esperarlo caímos,
En un sueño de dos espejos,
Una y otra vez más,
Besando el filo de lo desconocido.

El teatro mágico


Oh, bien nacido, escucha atentamente:
Estás ahora en el teatro mágico de los héroes y los demonios
Figuras mitológicas y superhumanas
Demonios, diosas, guerreros celestiales, gigantes.
Angeles, Bodhisatvas, enanos, cruzados
Duendes, demonios, santos, brujos, extraterrestres.
Espíritus infernales, duendecillos, caballeros y emperadores
El DiosLoto de la danza
El gran hombre viejo, la divina criatura,
El trampista, el metamorfo,
El adiestramonstruos,
La madre de las diosas, la bruja.
El dios de la luna, el errante.
La totalidad del divino teatro de figuras representando el cenit de la
sabiduría humana
No tengas miedo de ellos
Están dentro de ti
Tu propia inteligencia creativa es el mago reinante sobre ellos
Reconoce a las figuras como aspectos de ti mismo
Toda la fantástica comedia se halla en ti
No te sientas adherido a las figuras
Acuérdate de las enseñanzas
Aún puedes conseguir la liberación.

["El Libro Tibetano de los Muertos" de Timothy Leary]

martes

Decisión


Algunos hombres arman rompecabezas,
Los hay quienes hablan lejos de su piel
Algunos hacen sonar sus bolsillos sobre papeles vivos
Otros sólo quisieron dejarse llevar;

Algunos hombres desnudaron sus madejas
Quebraron sus miedos en la piedra sin edad,
La mayoría de los demás sólo callaron,
Quisieron ellos olvidar.

Callaron,
Se refugiaron tras el espejo de su imagen ,
Quitaron su sombra del sol,
Se disfrazaron de sus propios infiernos
Arrancaron el ojo del corazón;

Lo hicieron para guardarse en la noche del hambre,
Y asi mendigar del temor la sed compasiva
Para hacer cosas más importantes, dijeron ellos
Una ilusión indiferente a su muerte,
Una muerte sin sentido, nada más.

Algunos niños ahora juegan a ser puentes con sus espaldas,
Otros ya saltaron por sus alas , para hacerlas algún día volar.

...

"El hombre es desgraciado porque no sabe que es feliz" (Dostoievski)

sábado

Tutuguri


El rito del sol negro.

Y abajo, al pie del declive amargo,
cruelmente desesperado del corazón,
se abre el círculo de las seis cruces,
muy abajo
como encastrado en la tierra madre,
desencastrado del abrazo inmundo de la madre
que babea,

la tierra de carbón negro
es el único lugar húmedo
en esta grieta de roca.
El rito consiste en que el nuevo sol pase por siete puntos
antes de estallar en el orificio de la tierra.

Hay seis hombres,
uno por cada sol
y un séptimo hombre
vestido de negro y de carne roja
que es el sol
violento.

Este séptimo hombre
es un caballo,
un caballo con un hombre que lo acompaña.

Pero el caballo
es el sol
no el hombre.

Al ritmo desgarrante de un tambor y de una trompeta larga,
extraña,
los seis hombres
que estaban acostados,
enroscados a ras de la tierra

brotan sucesivamente como
girasoles

no soles
sino suelos que giran,
lotos de agua,
y cada brote
se corresponde con el gong cada vez más sombrío
y contenido
del tambor .
hasta que de pronto se ve llegar a todo galope;
con una velocidad. de vértigo,
al último sol,
al primer hombre,
al caballo negro y sobre él
un hombre desnudo
absolutamente desnudo
y virgen.
(sobre él)

Después de saltar, avanzan describiendo
meandros circulares
y el caballo de carne sangrante se enloquece
y caracolea sin cesar
en la cima de su risco
hasta que los seis hombres
terminan de rodear
las seis cruces.

La tensión mayor del rito es precisamente

LA ABOLICION DE LA CRUZ.

Cuando terminan de girar

arrancan
las cruces de la tierra
y el hombre desnudo
sobre el caballo
enarbola
una inmensa herradura
empapada en la sangre de una cuchillada.


Antonin Artaud

lunes

Necedad


Hay suficiente traición y odio, violencia,
necedad en el ser humano corriente
como para abastecer cualquier ejercito
o cualquier jornada.
Y los mejores asesinos son aquellos
que predican en su contra.
Y los que mejor odian son aquellos
que predican amor.
Y los que mejor luchan en la guerra
son, al final, aquellos que
predican paz.
Aquellos que hablan de Dios.
Necesitan a Dios
Aquellos que predican paz
No tienen paz.
Aquellos que predican amor
No tienen amor.
Cuidado con los predicadores
cuidado con los que saben.
Cuidado con
aquellos que
están siempre
leyendo
libros.
Cuidado con aquellos que detestan
la pobreza o están orgullosos de ella.
Cuidado con aquellos de alabanza rápida
pues necesitan que se les alabe a cambio.
Cuidado con aquellos que censuran con rapidez:
tienen miedo de lo que
no conocen.
Cuidado con aquellos que buscan constantes
multitudes; no son nada
solos.
Cuidado con
el hombre corriente
con la mujer corriente
cuidado con su amor.
Su amor es corriente, busca
lo corriente.
Pero es un genio al odiar
es lo suficientemente genial
al odiar como para matarte, como para matar
a cualquiera.
Al no querer la soledad
al no entender la soledad
intentarán destruir
cualquier cosa
que difiera
de lo suyo.
Al no ser capaces
de crear arte
no entenderán
el arte.
Considerarán su fracaso
como creadores
sólo como un fracaso
del mundo.
Al no ser capaces de amar plenamente
creerán que tu amor es
incompleto
y entonces te
odiarán.
Y su odio será perfecto
como un diamante resplandeciente
como una navaja
como una montaña
como un tigre
como cicuta
Su mejor
arte.

Charles Bukowsky

sábado

Simulacro


Necesidad es simulacro,
Importancia es simulacro.
Expectativa es simulacro.

Conocer es ver en otros
Entender es dejar de querer entender.

Todo está dispuesto,
Pero no terminado.
El universo, que es puro movimiento, es inexpugnable al momento de mostrar el hecho,
Ese callar y sólo callar
Que es simplemente
Vivir la insondable levedad
De ser una hoja que va cayendo,
Nada más.

domingo

El ojo de una manzana


Una manzana dentro de una semilla se hace de la realidad como la flor abierta y sin sombrilla, Como ver las cuentas que se mueven mientras los capullos se mudan.
Como cuando callamos, y entonces las cosas dejan de suceder para dejarnos a nosotros sucediendo;
Estamos,
¿Dónde estamos?.

Las nubes bajan y disipan,
La voluntad, cohesión de lo constelado;
Las cuentas son ahora las burbujas, mar entero percibido.

Hacemos figuras desde los elásticos, nuestros dedos.
Entonces un deja vu es el que se avienta,
Ese es también el lenguaje del cuerpo.
La presencia latente sin presencia,
Somos manzanas dentro de semillas.

Réquiem de bolsillo -canto dos-


Había querido esconder las lágrimas en mis bolsillos hasta que la noche las deshiciera,
Hasta que nadie me viera verlas lo haría,
Lo haría antes de aventarlas al puente,
Antes de enterrarlas, de volverle la cara hacia atrás.
Habría querido hacerlo,
Pero antes de hacerlo algo pasó,
Se quebraron las intenciones y como agujas ensangrentadas traspasaron de su lugar,
Se corrompieron, bebieron de la insolencia,
De su desolación escaparon sus rejas abruptas, ilusorias y casi inocentes,
De su muerte vivieron otras muertes,
De su vida agonizó su muerte,
De lo inocuo se hizo lo incurable.

Y así, al concretarse la fuga inesperada, me equivoqué...
Callé...
Caí...
Erré al descubrirme,
Lloré,
Volví,
Tal como seguir con los pies atados en la herida firme.

Y ya no fui el que quería hacerlo,
Nunca supe si desde ahí fui separado de los almacenes y los vendajes,
De los embriones de las nostalgias, risas y carruseles,
Nunca supe si desde las lágrimas habían nacido las ciudades,
Sus asfaltos de pena, de amor enarbolado, sus broqueles;
Si desde ahí la espiral quitó sus pantuflas para estirarse decidida, nunca lo supe,
Nunca supe si desde ahí la sal se hizo la línea de la mano que ahora se expande, dulce, destino.

Nunca lo supe,
Porque ahora ya he salido a buscarte.

sábado

Lo mismo tras la pared


Hace un rato, vi una araña en la cocina y el temor a que ella me hiciera daño me hizo querer matarla. Luego de mirarla unos segundos, pensé en lo estúpido que era creer en que una araña caminando por la pared de la cocina era una amenaza; “aunque esta araña es venenosa, más venenosa es la idea que tengo de sus intenciones” – pensé. La miré unos segundos más, soplé sobre ella, intenté tocarla con un tenedor y luego le dije que no la mataría. Guardé el tenedor y fui a mi habitación a escribir. De pronto, veo una araña caminar por el piso de la habitación, y sin pensarlo dos veces la pisé. Guardé silencio culpable. Entonces voy a la cocina para ver la araña en la pared, pero ya no estaba.

¿No era el mismo que hace un rato hablaba con ella acerca de mis miedos? ¿No era ella misma también? ¿No somos todos lo mismo, las arañas, las cocinas, las habitaciones y los temores?